domingo, 26 de agosto de 2007

la canción: "¡viva satana!"

Esta era una canción que escuchábamos en el desierto que hay entre Bariloche y San Martín de los Andes, si se va por el camino largo, que también es el camino asfaltado. Ahora le digo desierto. En ese entonces apenas si calificaba como estepa; desiertos, me decía, eran el Sahara, el Kalahari. Ahora estoy más tranquilo con las taxonomías.
Por esa ruta larga y sin curvas avanzaba el Falcon rural como una bala lenta, pesada, gris. Una bala perdida que nadie va a extrañar. Una bala cargada con frambuesas, en lugar de plomo.
Los asientos eran de cuero y, con el calor, hacían picar la espalda y las piernas. Por la ventana rota de atrás entraba el olor a combustión y el espejo se movía con el viento. En la ruta se veía ese espejismo que se ve siempre y que es como un gran charco de agua que permanece estático unos cuantos kilómetros más adelante. Eran días de calor y cielos celestes. En el estereo sonaba Babasónicos.

"¡Viva Satana!"


Tura Satana anda buscando su sombrero allá...
allá en Las Vegas.
Tura montada en una lata de fuego
deja estrobo de chispas por la carretera,
hace auto-stop en un rancho.
Quema a todos, mata a todos, un zafarrancho,
no entiende de súplicas, menos de llantos.
Luces titilan
alumbran marquesinas del "Gatas Latinas"
un burlsesque gliter.
Kinky, nasty, roba el show de stripper
y arranca mil hurras ¡Viva Satana! ¡Viva Satana!
Si va hacia algún lado o vuelve de él
sólo imagina una cosa,
todos los senderos por recorrer,
todos conducen a Córdoba.
No distingue el bien del mal,
la llaman la Ponderosa.
Porno-fronteras, prosti-dimensiones,
pussy-power-cat vibra la almeja.
Chinga Satana hecha humo y furia,
que velocidad, es un relámpago.
Lustra sus botas, refleja su frente
en la eternidad del mundo negro.
Manos violentas, guantes cubren garras
que pueden hundirte en un mar de cuervos.
Un tendal de espíritus quedaron atrás.
Si va hacia algún lado o vuelve de él
sólo imagina una cosa,
todos los destinos por recorrer,
todos conducen a Córdoba.
Luces titilan
alumbran marquesinas del "Gatas Latinas"
un burlsesque gliter.
Kinky, nasty, roba el show de stripper
y arranca mil hurras ¿Viva Satana! ¿Viva Satana!
Si va hacia algún lado o vuelve de él
sabe muy bien una cosa,
no quedan caminos por recorrer
y nunca llegará a Córdoba.
Vive salvaje y sin ley, la llaman la Ponderosa.

Al video no me dejan copiarlo, pero está en este link

1 comentario:

Anónimo dijo...

F.,

Lo encontré.

saludos!